Tanto en la serie "quipus" como en "nudos", Eielson explora las posibilidades de la materialidad sobre el lienzo, pero - sobretodo - presenta situaciones en donde se plasman la confluencia de diversas tensiones. En esta propuesta, experimento con dichas tensiones, rompiendo o quebrándolas mediante la edición digital de tres de sus obras principales. 

 

Eielson no era un escritor aficionado a las artes plásticas, ni un artista plástico que escribía poesia: Eielson fue una de esas figuras excepcionales que pudo destacar en todo. La mejor manera de definirlo: un artista. 

 

Nudos 

 

Nudos que nadan
En misteriosos océanos
De nada

 

Nudos que son sombras
De infinitos nudos
Celestes

 

Divinos nudos nacidos
Entre dos manos
Unidas

 

Nudos que no dicen nada
Y nudos que todo lo dicen

 

 

Se anuda solamente
Todo se vuelve nada
Si se anuda un zapato
Se anuda también el pie
Y el zapato se vuelve todo
Si no se anuda nada no hay nudo
Ni pie ni nada y en lugar de todo
Hay de nuevo un zapato cuya medida
Es un número nulo que nos anuda a la nada
Y nuevamente
Al zapato


De: Sin Título
Jorge Eduardo Eielson

Tan grande pero tan grande
Y a la vez tan pequeña
Que nunca podremos verla
Ni tocarla. Puede ser también
Que no exista cifra alguna
Para medirla ni palabra
Para nombrarla. Pero entonces
¿Por qué todos los días
Apenas abro los ojos
Veo una esfera amarilla
Que me llena de estupor
Y maravilla?

 

 

 

 

sólo el sol
el sol solamente
solo en el cielo
y yo tan solo
a solas con el sol
sonrío simplemente

 

De: Tema y variaciones
Jorge Eduardo Eielson